EL SEMBRADOR DE ARBOLES EN FUNZA

Luis Antonio Pardo, el sembrador de árboles Conoce perfectamente cada especie de árboles y cuál es la más apropiada para cada sitio. Habla con propiedad de “Siete cueros”,”Calistero”,”Jazmín del Cabo”, entre otros. Va de un lado a otro del terreno escogido, evidenciando que las siembras queden bien hechas.

Funza, Cundinamarca 10 de julio de 2017 Es un hombre ya maduro, pero con la vitalidad de un colegial. Sus padres lo bautizaron como Luis Antonio Pardo y con los años, él se convirtió en técnico de la Secretaría de Desarrollo Económico Sostenible, como coordinador de zonas verdes, parques y ornato del municipio. Al principio aparenta por su ceño adusto, ser de pocos amigos, pero a medida que conversamos con él, nos encontramos con una persona amable, sencilla y enamorada de su trabajo. Nacido en Fosca, un pequeño municipio al oriente de Cundinamarca, laboró muchos años con la Secretaría de Salud Departamental como técnico profesional en saneamiento ambiental, llegó a Funza hace 9 años y el entonces alcalde Jorge Rey, hoy gobernador, le propuso esta labor. Al principio, no conocía mucho del tema pero como afirma “Yo soy de origen campesino y uno lleva en la sangre el cuido, siembro y desarrollo de los árboles”, dice textualmente. Poco a poco logró capacitarse  en los asuntos que involucran la siembra de especies. Hoy en día se ha convertido en una autoridad en materia forestal. A Luis Antonio siempre se le ve siempre en las jornadas de siembra de árboles que constantemente la CAR Cundinamarca realiza con la administración de Funza. Enfundado en su overol, botas y la chaqueta verde que lo identifica como funcionario de la Alcaldía, bajando con cuidado las plántulas, revisando los hoyos donde van a ser depositadas, o abriéndolos, él mismo, con un barretón, mirando el abono y enseñando a quienes participan en estas jornadas sobre la manera correcta de realizar esta hermosa operación.   Conoce perfectamente cada especie y cuál es la más apropiada para cada sitio. Habla con propiedad de “Siete cueros”,”Calistero”,”Jazmín del Cabo”, entre otros. Va de un lado a otro del terreno escogido, evidenciando que las siembras queden bien hechas. Dice, sin dudar, que en estos años ha sembrado cerca de 6 mil árboles, a los cuales cariñosamente llama “sus ahijados”, además, desataca la labor de la CAR por su trabajo y colaboración con el municipio. “Es una entidad con la cual se trabaja en armonía”. Sin embargo, con su franqueza provinciana, afirma que se debe insistir en que cada persona que siembre un árbol debe apropiarse de él, ser su padrino. “Me entristece que muchos aprovechan estas actividades para la foto o darse vitrina, pero luego se olvidan de ese arbolito que sembraron” Finalmente y antes de extendernos su mano franca, curtida por la tierra y endurecida por el trabajo, nos pide que incentivemos en las escuelas y colegios la enseñanza sobre la siembra y cuidado de los árboles ya que dice; “Un árbol es vida” Y así, don José Antonio Pardo, el sembrador de árboles, se aleja con una plántula en su mano, la cual entrega al alcalde de Funza para que el mandatario inicie la jornada de siembra esta vez, en el Humedal Gualí. .

“Me entristece que muchos aprovechan estas actividades para la foto o darse vitrina, pero luego se olvidan de ese arbolito que sembraron” comenta Luis Pardo.