RECORDANDO NUESTROS ANTEPASADOS CON LA CHICHA
Por: Leidy Tatiana Machado
Rodríguez
Con chicha, sin chicha o un
poco agotada se llevó a cabo el VI “chichazo” colombiano en la
Casa Museo Quevedo Zornoza del municipio
de Zipaquirá, un tal 27 de mayo del año
que ya casi se va a acabar y que
antes de que eso pase había que tomarnos una buena chicha.
Con la invitación ¡Sumerce… póngase su ruana y venga…Tómese una
chicha al ritmo de la música andina
colombiana! Fueron llegando todos los
enruanados y encapuchados que ni cortos ni perezosos se acercaron a ese lugar.
Dieron toda la bienvenida,
pero mientras eso pasaba se escuchaban gritos ¡una chichita, para este pobre sediento! ¡Se
regó la chicha! ¡Quiero más y más! Al parecer esta bebida los tenía a todos los
asistentes embelesados por su hermosa presencia.
Diferentes grupos de música entonaron antes de entonarse, esos melodiosos versos de la música colombiana
que se sienten con el alma y se disfrutan con el corazón.
Entre chicha, bailes y
poesías, fue transcurriendo la noche que parecía larga pero que lamentablemente
iba llegando a su fin, así que con el
recordatorio de una totuma y un buen sabor en la boca, los participantes fueron abandonando el
recinto sin antes preguntarse si les tocaría esperar hasta el otro año para
seguir deleitándose con esa bebida tradicional.
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